El concepto de negocio escalable tiene mucho que ver con una sociedad cambiante y con picos de actividad imprevistos. ¿Quieres conocer qué es y cómo conseguir que tu negocio lo sea? Te interesa este artículo…
Características de un negocio escalable
Un negocio escalable es aquel que es capaz de conseguir un aumento sustancial de la facturación (y por ende, de los beneficios) con un incremento mínimo de la inversión.
Muchas veces, se habla del concepto de subir de nivel en un negocio. Pues bien, aquí se trataría de escalar de nivel de facturación y ganancias sin que el aumento de los costes o la inversión se corresponda con ello.
Por lo tanto, estamos ante un modelo o concepto de negocio propio de las empresas tech, o centradas en este campo. Aunque también se podría dar en otros ámbitos.
Qué hacer para que tu negocio sea escalable
Hacer un Plan de Escalabilidad, si se trata de un negocio ya en funcionamiento, puede ser interesante. En caso de que empieces tu actividad, puedes hacer proyecciones de escalabilidad (realistas) desde el momento en que planteas un Plan de Negocio.
Sea como fuere, sí que existen algunas cuestiones que debes tener presentes para contribuir al objetivo. Y la estrategia es clave para que puedas alcanzar el éxito. Toma nota:
1. Negocio escalable: Apuesta por el talento
El talento humano es, probablemente, la fuerza más disruptiva que existe. Una idea brillante puede ser de fácil implementación, pero, en cambio, proporcionar un gran potencial de crecimiento. Por esa razón, promueve políticas de captación, retención y reciclaje del talento. Esto, a la larga, será una mejora para ti y tu negocio y conseguirás que este sea escalable.
2. Automatiza todo lo que puedas
La automatización de los procesos es otra de las maneras de reducir costes y, de esta manera, adoptar nuevos retos. Esto es importante, y toca todas las partes de la actividad, desde la investigación hasta el trato con el cliente y, en primer lugar, se tiene que tratar la cultura organizativa.
Utilizar un nuevo software como sistema operativo o un ERP ayudará, sin duda, a buscar nuevas oportunidades de negocio con un coste mínimo. Asimismo, debes saber que la incorporación de nuevo hardware, igualmente, también será interesante. Ambas cosas influirán, y mucho, en la mejora de los resultados corporativos.
Recordemos que la automatización es un proceso sin vuelta de hoja: cuando una empresa lo inicia, no vuelve al punto anterior. En consecuencia, te conviene tenerlo presente.
3. Prioriza los productos o servicios estandarizados
Estandarizar es otra de las maneras de reducir costes y acceder a un mayor mercado. ¿Y esto qué significa? Básicamente, facilitar que un producto o servicio se abra al mayor número de personas posible, siempre que sean de tu target.
¿Cómo hacerlo? Por ejemplo, cumpliendo con estándares internacionales de calidad ISO, en primer lugar. Otra opción es adaptarte a la legislación comunitaria o a las costumbres de un amplio número de países. Y, por supuesto, utilizar uno o varios idiomas que tengan la capacidad de entender varias personas.
Otra parte importante del concepto de estandarización está en el precio: este debe ser accesible. Un producto o servicio estandarizado es todo lo contrario de un producto de nicho, pero en una etapa de crecimiento del mercado te puede interesar.
4. Céntrate en mercados amplios
Centrarse en mercados amplios es otra forma de conseguir un negocio escalable. Y cuando hablamos de mercados amplios nos referimos a la variable demográfica, pero, también, geográfica. En las empresas tech, esta es una forma muy interesante para que ganes en competitividad. Asimismo, y sobre todo en un primer momento, comprueba que tu target sea lo más amplio posible.
5. Trabaja vía online
Uno de los mayores costes, en todos los sentidos, es el de trabajar de forma presencial. Por lo tanto, y a no ser que sea inevitable, es una metodología que deberías tender a modificar: se pierde más tiempo, de manera que no es la mejor opción. Además, los trabajadores y clientes valoran cada vez más cuestiones como estar en casa o conciliar. En consecuencia, es un punto que se debe considerar. Un negocio escalable intentará buscar fórmulas de trabajo más flexibles.
6. Optimiza tus recursos
Optimizar tus recursos es, en definitiva, otra de las maneras de que tu empresa sea escalable. Y, para ello, debes hacer un plan correcto de ingresos y gastos, eliminando todo lo superfluo que no aporte nada. Asimismo, deberías plantearte si tu organigrama es el más adecuado, tal y como lo tienes estructurado. Y, a veces, el outsourcing comercial puede ser interesante. Lo que tienes que buscar es que todo lo que tienes disponible dé lo mejor de sí.
Haz que tu negocio pase a otro nivel
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